Tener una adecuada ‘higiene del sueño’ es fundamental para lograr un sueño reparador. Entendemos por higiene del sueño tener un comportamiento ordenado a la hora de ir a descansar. Se considera al sueño como reparador si nos recupera del desgaste sufrido en las actividades diarias.
Higiene del sueño implica:
– Mantener de forma habitual el mismo horario para ir a dormir y levantarse.
– Evitar ir a dormir con factores que actúen como estimulantes externos como por ejemplo, la radio o la televisión.
– Dormir un numero de horas suficiente, habitualmente entre 7 y 8 horas diarias
Se consideran malos hábitos para conciliar el sueño: Algunos de los malos hábitos más comunes que dificultan la conciliación del sueño son fumar, tomar excitantes –como café, té o chocolate- antes de ir a dormir o cenar de manera abundante.